sábado, 29 de septiembre de 2007

Referentes Sociales

Publicada el martes 25 de septiembre de 2007

La sociedad dominicana exhibía con orgullo patrones de buena conducta y desde luego la personificación de estos patrones en todos los sectores.

En las comunidades era común hacer mención de una familia como ejemplo de dignidad, trabajo y dedicación, los cuales constituían puntos de referencias al momento de sentirse motivados para emprender una acción positiva y esperanzadora.

Hoy en día la realidad es otra, la sociedad tiene una absoluta escasez de referentes sociales a seguir, a tal punto que los hijos no toman como ejemplo, en muchos casos a sus padres, algo deprimente cuando estos tienen puntos positivos dignos de consideración.

La mayoría de jóvenes tiene como referentes, a personas que exhiben una vida con una gran holganza económica en base a sus esfuerzos, pero nuestros jóvenes sólo observan el producto terminado y no así, todo el sacrificio que los llevo hasta ese punto de bienestar de sus vidas, para citar un ejemplo: nuestros grandes beisbolistas; cuantas horas de duros entrenamientos, cuanta abstención de deseos, y el empresario, cuantas noches de desvelo en sus años universitarios, y otros numerosos ejemplos.

Los referentes sociales de hoy; reggaetoneros, jóvenes que exhiben su alto nivel de actualización en cuanto al tigueraje, incluso estar en los ambientes de las drogas es sencillamente estar, alante a alante.

A medida que va avanzando el tiempo se va degenerando aun más esta situación, ya que el joven de hoy lo desea todo sin querer hacer sacrificios, siguiendo patrones que observa en su medio lo cual entiende son los más favorables; vehículos lujosos, celulares, tenis caros y demás cosas, que lucen en demasía aquellas personas que no le ha costado mucho.

Debemos apostar al trabajo tesonero y cifrarnos metas asimilables y que nos permitan sentir bien con nosotros mismos, y desde luego buscar verdaderos referentes sociales que tengan los suficientes meritos que nos permitan tomarlos como paradigmas de nuestras vidas.

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