viernes, 25 de julio de 2008

Un valor; la lealtad

 

 

La virtud más preciada que puede tener un ser humano es la lealtad, independientemente de que algunos consideren que tan sólo se trata de un concepto filosófico, y otros digan que es un mito, partiendo del supuesto de que en los tiempos en que vivimos esos valores se ha venido extinguiendo.

No son pocos los comportamientos de muchas personas que diariamente llevan a pensar de esa manera, que a la postre se constituyen en actos de traición; pero tal como dice el poeta, aún no todo está perdido.

 

Algunos definen la lealtad como un corresponder, una obligación que se tiene con los demás. Es un compromiso a defender lo que creemos y en quien creemos, lo cual se constituye en uno de los más importantes valores.

Cuando somos leales logramos llevar la amistad y cualquier otra relación a su etapa más profunda. Todos podemos tener un amigo superficial, o trabajar en un lugar simplemente porque nos pagan. Sin embargo la lealtad implica un compromiso que va más hondo: el estar con un amigo en las buenas y malas circunstancias, es el trabajar no sólo porque nos pagan, sino porque tenemos un compromiso más profundo con la institución en donde laboramos, y con la sociedad misma, y si ese amigo te ha socorrido y dado la mano en momentos de naufragio, permitiéndote ascender, ya sea en lo social, económico o político, no es leal que le dé la espalda y lo lance a las víboras en plena selva.

 

La lealtad no debe contemplarse como mero concepto que explique el cumplimiento de lo que exigen las leyes morales. Hay que asumirla como un comportamiento para cada pasa diario, y hasta para cada pensamiento.

 

Escuche decir a alguien que la lealtad es un valor que no es fácil de localizar en estos caminos endemoniados. Es más común aquella persona que al saber que puede obtener algo de nosotros se nos acerque y cuando dejamos de serles útil nos abandona sin más.

 

Mi fenecida abuela, quien era una mujer de pensamiento rural, me reiteraba que el que no es leal con sus hermanos, con sus amigos, prójimos, con su país, no recibe nunca la bendición de Dios y siempre procurará no mirar a los ojos.

Todas esas reflexiones me las hacía mi abuela durante la adolescencia, y es ahora cuando las asimilo en su justa dimensión.

 

Es normal saber que alguien frecuenta un grupo contrario, porque le de más beneficios, y lo que acaba ocurriendo es que nadie confía en ese tipo de persona.

Para concluir, debo advertir, que la lealtad jamás deberá ser obsesiva, porque tampoco se puede ser leal a causas perversas; ya que hay ocasiones en que por estar bajo la sombra de la maldad, hay una supuesta lealtad que raya en lo perverso, y hace daño. 

 

 

 

 

jueves, 24 de julio de 2008

Necesidad de Cambios

 

 

Comprobado está que los seres humanos no nacemos con un patrón de vida definido, y que por esta lógica razón existan en toda una sociedad múltiples tipos de comportamientos, modas y manera de ser de las personas, también es lógico que por el hecho de existir tantos tipos de formas de ser, esto no es óbice para que usted se haga una introspección de las cosas que usted debe cambiar para poder sobrellevar sus relaciones interpersonales con los que les rodean.

 

Analizando un spot publicitario, llegue a la conclusión antes expuesta, en el cual aparece un cactus, propio de su condición, lleno de espinas, situación ésta que coarta sus relaciones con los demás, imposibilitándosele toda actividad que se efectuara en su área de trabajo.

Y como en la mayoría de los casos pasa, son las demás personas que identifican nuestras fallas, el personaje antes mencionado, después de explotar un globo a una infante, ésta a su vez procede a ponerle un parche justamente a la espina que le exploto su globo. Desde entonces se cubrió todas sus espinas y pudo relacionarse con los demás sin herirlos.

 

Es exactamente lo que debemos hacer nosotros en innumerables ocasiones, identificar las fallas que coartan nuestro diario vivir y que nos impiden ser cada día mejores, no hay nada más peripatético y recalcitrante, que una persona que se encubre en la frase “yo soy así, y punto”, como si los demás estamos obligados a aguantar ese egocentrismo febril, que en vez de fortaleza demuestra debilidad emocional.

Revisemos, analicemos con que palabras herimos a los demás, sepa usted que las palabras pueden lastimar más que algunos golpes físicos.

 

Todo ser humano tiene necesidad de cambios, pruebe nuevos cambios y me dice como le va…!

 

 

 

 

viernes, 11 de julio de 2008

Marketing Personal

 

 

Leyendo un artículo que me facilitara mi dilecto amigo, José Andrés, en el cual se establecen unos tips para profesionales de diversas áreas destacando en gran medida las relaciones interpersonales que se pueden tener con las personas que solicitan servicios.

 

El autor invita a que uno se vea como un empresario y el lugar donde usted ofrece sus servicios como empresa; consultorio, oficinas de abogados, consultores, contadores, auditores etc.

Interiorizarlo profundamente y no verse como un simple profesional.

 

Estas aseveraciones tan interesantes, asumidas en su justa dimensión puede ser el detonante de la tendencia de estos tiempos en lo referente a lo que tiene que ver con los servicios que prestan los profesionales agrupados en oficinas como se explica en el párrafo anterior.

Y es que desde hace mucho tiempo se viene considerando empresas a otros renglones de la actividad económica, que por lo general producen productos; fábricas, empresas de manufactura, etc. Y no así al profesional que presta sus servicios de forma independiente.

 

Agrega el autor, el mercado de servicios profesionales es más complejo y en el así como las empresas son personas, también las personas son empresas. La rentabilidad sería mucho mayor si las prestadoras de servicios se vieran así mismo como marcas y desarrollaran una gestión de marketing.

 

Como es sabido por todos, nuestro medio se nutre mucho de las recomendaciones, de ahí que las herramientas de comunicación de marketing idóneas para generar confianza son las relaciones públicas y el referimiento, para lograr esto el producto (persona) debe tener integridad y honestidad en las diligencias que lleve a cabo para sus clientes, y esto a su vez fungirán como promotores de usted.

 

Destaca en otro sentido el autor, que muchos profesionales creen que los clientes compran su especialidad. Sin embargo, los compradores son incapaces de evaluar técnicamente si se trata de buenos médicos, contadores o abogados; pero si saben si la relación es buena, si les dan seguimiento a sus casos y si son valorados. Lo que el cliente compra es una relación basada en impresiones, no en una especialidad y de eso se trata el marketing de profesionales: de manejar impresiones intangibles en gran medida.

 

 

 

 

viernes, 4 de julio de 2008

Nuestros costosos legisladores

 

 

¿Qué come un diputado? ¿De que viste un diputado? ¿Dónde estudian los hijos de nuestros diputados? Y estas son algunas de los innumerables interrogantes que le surgen a uno como ciudadano al ver como la cámara de diputados se ha aumentado el sueldo de forma tan desproporcionada.

 

Resulta que nos han metido en la cabeza y más allá de ella, de que estamos en crisis, de que debemos ser austeros en el gasto, y de 178 diputados que tiene la cámara baja, en lo adelante cobraran un aumento de 59,000 pesos elevándose el salario de 116 mil a 175 mil, lo que implicara RD$10 millones 502 mil por mes.

 

Cuando analizamos informes como el del PNUD, vemos como hay ciudadanos que sobreviven con salarios de hasta cinco mil pesos mensuales; comen, sus hijos asisten a la escuela, pagan vivienda, obviamente que todo esto de forma deprimente, caramba pero viven, llevándoselos el infierno, pero viven. Ah nuestros diputados no podían seguir con dieciséis mil al mes, más gastos de representación, viáticos y otras facilidades que no salen a la luz pública.

 

En momentos en que nuestros diputados enviaron a un juicio político a los miembros de la cámara de cuentas, por entre otras irregularidades, haber pretendido un aumento de sueldo desproporcionado. Ahora ellos hacen lo que muy bien hecho criticaron, por la crucifixión de Jesucristo y estamos en crisis? Sí en crisis estamos los ciudadanos comunes, no así nuestras autoridades y legisladores.

 

Decía mi abuela, quien tenía una mentalidad rural, “que lo mejor de la vida es no depender de nadie”. Ahora lo comprendo porque mientras los diputados en sólo horas discuten su aumento, los médicos, profesores, y demás servidores públicos y privados, dependen de una serie de consultas y toda la burocracia mediática para tener un aumento de sueldo, que en gran medida la inflación ya se la ha tragado.